martes, 25 de marzo de 2014

NORMCORE

Dicen que es lo último, lo más cooll, lo más fashion, esto de ser y parecer NORMCORE, o sea, que estamos de enhorabuena la gente corriente, la gente gris como yo. Ya me gustaría que esta moda, que está apareciendo ahora, la de no destacar en nada y con nada, estuviera implantada en mis años mozos, en los de mi primera juventud, los sesentaitantos, en dónde el que no sobresalía en algo, la tenía fresca, por ejemplo, bailar el twist. En los incipientes guateques de entonces, los de barreño de cinc y cucharón para el cup de frutas o sangría, si no espabilabas con algo así o similar, eras un proscrito, un condenado a poner los discos que era casi, casi, como ir a galeras. Con las chicas de entonces tenías que hacer méritos bailando unas cuantas piezas de las "sueltas" para que te regalaran unos bailes de los de "agarrado".



Mi amigo Javier era el que destacaba, con mucho, en esto de los sueltos, y no digamos en lo de bailar el twist y rock and roll. Cualquier día le pregunto si fueron abundantes o escasos los regalos que obtuvo a cambio de bailar bien, muy bien, los bailes que privaban en esos años. Ahora, o sea, hoy en día, buscas en esto del internet qué es la sangría o el cup ese de los guateques de antaño  y no se cortan un pelo al describirlo como una bebida hecha a base de frutas frescas (manzanas, naranjas, peras, plátanos, limón, ..) vino blanco y "mucho hielo". 


Pero vamos a ver, vamos por partes, ¿cómo que mucho hielo? si en esos años estábamos aun con el entrañable y personalizado reparto a domicilio de las barras, o trozos, del idem  para las fresqueras; 
¿cómo que frutas frescas? si era la época en dónde lo del carozo formaba parte del léxico del común de los mortales; hacer memoria: ¿me das el carozo? ¿me das una calada? ¿me das la pava?. Si buscas el significado, la etimología de "carozo", te remiten a eso de mazorca, y claro, eso no es así, al pie de la letra; ponte en el lugar de un tipo de 13 o 14 años, y uno ochenta y tantos de alto, en el recreo de media mañana, y con bastante hambre, ya que no estás por la labor de madrugar para hacer tu desayuno en condiciones y, a ver, como eres alto miras en el patio y al mismo tiempo oteas, y ves que de cuarenta colegas, 15 o 20 están dándole a la pieza de fruta y, si espabilas, pues te puedes hacer con diez o doce carozos, que traducido a gramos, antaño libras, pueden ser bastante más de cuarto y mitad. 

Pero bueno, me estoy saliendo del tema y de lo que quería tratar, que es eso que dije antes, que los sositos estamos de enhorabuena con la venida del NORMCORE que, la verdad, me está costando bastante trabajo llegar a entender esa tendencia consistente en vestir de forma anodina, sin gracia, sin moda. Leo por ahí que lo de Normocore es "una secuela de la cultura Hipster, o una evolución. La corriente Normcore tiene como fin, entre otras actitudes, vestir de forma anodina, utilizando prendas simplemente para tapar el cuerpo y sin ningún fin estético. Vaya, que tanto pensar qué nos ponemos para estar monos, y ahora lo más moderno es no pensar ni estar eso, "monos".  Yo, después de leer todo este tratado de modas y costumbres, llego a la conclusión de que los de provincias como yo, los periféricos, no nos enteramos de nada, por lo menos en tiempo y hora y, así, no me extraña que en más de una ocasión se me haya pasado el arroz.

La semana pasada estuve en una comida de amigos de la infancia-primera juventud y, por las mesas -éramos más de cien- 



circularon fotos de nosotros ataviados a la moda de la época: todos con pantalones pitillo, chaqueta americana, camisas blancas y corbatas. Este "uniforme" era obligatorio en sábados, domingos y "fiestas de guardar", por lo menos para la gente de fuera de puertas como yo. Esta foto del año 1965-66, camino del estadio de Riazor un día de fútbol,  en donde estamos mi hermano Juan, con casi 18 años, y yo, casi 16 años, es una muestra clara de la vestimenta que nos adornaba. Espero que las corbatas, por lo menos, fueran de distinto color, aunque las rayas se ven distintas, unas a la izquierda y otras a la diestra. Con respecto a la norma "nunca - siempre - a veces", que se aplica a los botones abrochados (abotonados) de la "americana", empezando por el de abajo,  no se si yo la cumplía o no, y es que, la verdad, no veo si tenía dos o tres botones.




Hacía mención a lo de "fuera de puertas", porque así nos decían a los que vivíamos en los barrios periféricos de las ciudades, en donde estaban las casetas de consumos, los fielatos,  que daban cobijo a los funcionarios de la época, que controlaban los productos agrícolas que entraban en la ciudad.
 Un poco más tarde irrumpió en nuestras vidas el icono BB, la Brigitte  Bardot



y todos cantábamos:

 Brigitte Bardot, Bardot
tu estilo triunfó, triunfó
y así la nueva ola de la moda se creó.
B.B., el secreto de tu hechizo y de tu encanto no lo sé
¿será tu nariz? !no sé!
¿tu chic de París? !no se!
¿tu gracia coqueta? !no sé!
Tú tienes ese "no se que" que a todos hace enloquecer...

Quién me diera, o sea, ya me gustaría, encontrar el disco de esta diosa de la sensualidad de aquellos años, que siempre aparecía en los sueños, nada más cerrar los ojos......
También, ya me gustaría que, además de la moda NORMCORE, volviera la moda de soñar con las B.B.'s de la época, con las chicas de mi barrio, con tu querida primera chica de la época, con la que soñabas que siempre bailabas "agarrao".
Nada más, amigos, paro esto antes de que avance la nostalgia, pero eso si, no sin antes darte un consejito: Por favor, ríndete, no tienes escapatoria, ¿no sientes tu persona rodeada por uno de mis abracitos?, pues eso, un abracito.

Olvidaba la frase:
SI NO SUELTAS EL PASADO, CON QUÉ MANO AGARRAS TU FUTURO? (anónimo)
y no me resisto a esta otra:
SOLO HAY DOS COSAS QUE PODEMOS PERDER: EL TIEMPO Y LA VIDA; LA SEGUNDA ES INEVITABLE, Y LA PRIMERA IMPERDONABLE (José María Franco Cabrera)

dirección de mi blog: www.elsexagenario.blogspot.com


7 comentarios:

  1. Qué brillante reflexión sobre la moda y sobre otro tiempo que, quizá haya sido mejor o tal vez y por seguro, haya sido otro, distinto, especial y único.
    Guapísimos los dos.

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  2. Gracias Patricia, buen análisis por tu parte de lo que fue y de lo que es.
    Lo de guapos es innato a todos los de esa edad, faltaría más.
    Un abracito

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  3. Interesante post, solamente una curiosidad. Qué parada del tranvia era esa?. La sitúo a unos 1000 kms. de Monelos y me parece raro que el tranvía haga un recorrido tan largo.

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  4. Chiquillo me tienes al dia en todo,no sabia yo el nombre ese de andar como te de la gana jiji me encanta ya no tengo que pensar si combino o no....
    A poner lo primero que salga....que penita.
    Tienes razón el que mejor bailaba era Javier.
    Que guapos estais. Contesta a Juan,yo no reconozco esa parada
    Un abrazito amigo.

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  5. Brillante reflexión.

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  6. Queridos hermanos Miguel y juan ahí está para el recuerdo esa foto memorable y que Juan seguía los partidos del Depor hasta el día anterior a su fallecimiento.
    ! Qué grande era y que grandes sois!
    Mis recuerdos inolvidables!

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  7. Fantástico reflejo de una época ya lejana, pero mucho más real y contundente que lo que hoy nos “asombra” a nuestro alrededor.
    Guapotes y con estilo esos hermanos, que formaron parte de una saga extraordinaria y ejemplar.
    Comparto todo el relato.
    Un abracito, pero grande, muy grande.

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