jueves, 22 de marzo de 2012

TALA DE ÁRBOLES

A veces, la parte de atrás, el trastero de la casa o de la finca, se convierte sin querer en una leonera. Mi "parte de atrás" incluía leñero, porquería, mucha porquería, incluso contenía porquería, garaje de viejas reliquias motorizadas, gallineros, jaulas de conejos, todo lo impensable que te puedas imaginar, árboles baratos inmensos, muy grandes, tremendamente grandes y en especial, una tuya que según mis cálculos medía alrededor de 16 metros de alto. Y eso no era lo peor, ya que a una altura de dos metros se ramificaba en multitud de "árboles" (contamos 35 ramas) de dimensiones bastante considerables. A principios de los años 80 tuve la "gran idea" de crear mi bosque particular y para eso planté "bastantes árboles", "bastante juntos" y "bastante baratos". Hago hincapié en lo de baratos, porque el precio es inversamente proporcional a la rapidez en su crecimiento. Al cabo de 30 años me encuentro con árboles que se comen unos a los otros y además, añádele el peligro que encierran estos árboles de hoja perenne en días de vendaval. El espacio para la tala era muy limitado y los medios bastante escasos. Bien es verdad que para estos casos difíciles poseo, o está a mi lado "un capital humano" de dimensiones impagables. Mi vecino y amigo Manolo, "Lolo de Dexo", experto en estas lides y en otras muchas, y que es un leal y seguro colaborador. 

Para situarnos, explico la zona de actuación. El círculo rojo enmarca la situación de los árboles a talar y también el tejado de los "trasteros y gallineros". (gran parte de ellos están ocultos por los árboles) Tenía cubiertos alrededor de 60 m2 y el proyecto es reducirlos a 45 m2. El tipo de construcción era a base de angulares de hierro galvanizado a modo de pilares, hincados en la tierra y el cerramiento era en madera, imitando de forma no muy afortunada, una cabaña.

en esta foto se aprecia como las ramas de los árboles avanzaban por encima del tejado. Esto tenía una ventaja y es que la sombra mantenía una buena temperatura en los gallineros. Bueno, no pongo más fotos de lo que tenía porque "dame noxo" (me da verguenza)
Vayamos a la tala. Mi amigo Lolo tiene una motosierra bastante potente pero para trabajar en una finca con tomas de corriente, no hay como una sierra eléctrica. Y la que tengo yo, comprada en Lidl, marca Orión, de 2.200 vatios, es que no tiene precio, bueno si, 60 € que no se dan terminado. Es increíble el trabajo que ha realizado y aun está como nueva, incluida la sierra de cadena.

empezamos cortando las ramas más importantes

y después, casi pegado al terreno, le hacíamos dos cortes en forma de cuña

siempre en la dirección hacía donde queríamos que cayera el árbol.

troncos de cierta envergadura que tomaron al caer la dirección adecuada

árbol en el suelo, árbol troceado 

no había mucho sitio. Después de "entrenar con estos "palitos un poco grandes" llegó la hora de la verdad, el grande, el enorme....

rama a rama, atamos una cuerda lo más alto posible. (la escalera es de dos hojas y abre 8 metros útiles en total)

la cuerda la hacíamos firme en un árbol grande que estaba a una distancia apropiada y en la dirección idónea

y a continuación, el corte en

cuña como ya vimos antes. Al sobrepasar los 15 metros de alto, cada rama la "abatimos" en dos veces

y aquí esta el secreto del éxito: un polipasto de tres roldanas (guindaleta, decimos nosotros)

que le daba una desmultiplicación tremenda. Después de haber realizado los cortes en cuña, era cuando tensábamos lo máximo que podíamos para darle a continución el corte definivo en el lado contrario al de la cuña.


a medio camino ya habíamos hecho bastante leña del "árbol caído"

y quemado previa petición de permiso, otra cantidad importante de ramas no aprovechables para leña

pues eso, poquito a poco hasta llegar

a las últimas

derradeiras, en gallego 
y "ESTO", que no se porque le llaman tocón, quedará para la posteridad. Aunque hay un sistema para eliminarlo que consiste en taladrar varios orificios que se llenan de clorato sódico, se tapan y al cabo de un mes se enciende una hoguera en lo alto.


de todas las maneras, al que tala muchos árboles y no planta ninguno, le puede pasar algo parecido a esto

La frase: 
AUNQUE UN ÁRBOL PUEDA LLEGAR A SER MUY ALTO, LAS HOJAS CAÍDAS REGRESAN A LA RAÍZ (proverbio malayo) 

Un abracito

fotos propias
 grabado de la red










1 comentario:

  1. ¡Menuda hazaña!
    Sí que habían crecido.
    Cada vez me maravilla más la Naturaleza. Nosotros, a veces, preocupándonos por pequeñas cosas sin detenernos a pensar que los árboles siguen creciendo, las flores brotando y marchitándose en un ciclo sin fin y el sol naciendo cada amanecer.
    Enhorabuena por el trabajo bien hecho y por la ayuda recibida, señal de que lo mereces.
    Un beso.

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